miércoles, 5 de octubre de 2011

Fin de la segunda etapa: Semana de congresos.


Habitación rectangular limpia. En frente, la puerta del baño blanca impecable cerrada. Aun puedo distinguir el olor que han dejado las tuberías por dejarlo abierto. Yo, sobre una cama de 90 junto a la pared. Como a mí me gusta. A mi derecha una pequeña mesita, una lámpara y unos pañuelos para mi molesta mucosidad la acompañan. Más allá la otra cama. Vacía e impecable. Al final un armario gris. Al otro lado del muro, justo detrás de mí, numerosos perros y gallos interminables me recuerdan que definitivamente estoy aquí. Estoy en Cerritos.


30 de septiembre. Mi cumpleaños.

A duras penas me levanté de mi sueño a las 10:00h. Ya agarrada la hora española siendo además la noche anterior de nuevo larga. Para ese momento creí en sueños haber contado unos 20 sms y alguna llamada que gustosamente me levantaron en la noche guatemalteca, recordando lo especial del día. (Una pena que se cortara con casa de la Abu Jose, os quiero igual!)

Raquel se asomó a mi puerta ya felicitándome. Me daba los buenos días y me recordaba que Marco llegaba en 10 minutos. Ups! Ya ni lo recordaba. En la noche se dicen demasiadas cosas…

Obviamente era un día especial, al menos para mí. Estuve recordándolo a modo de broma durante varios días atrás y creo que lo tuvieron en cuenta. Marco, en la noche del jueves, me dijo que tenía una sorpresita preparada para mí. Que debía estar preparado al medio día pues vendría a buscarme (yo no sé qué hora es medio día para estos chapines). 

Yo sabía que las chicas no pudieron preparar nada. Hemos convivido 24 horas del día y conozco (al igual que ellas los míos) cada movimiento que han realizado en Guate. Realmente el regalo ya era haber estado con tan buen feeling. Así que la idea de irme con Marco por Guate y conocer “gente” pues me sedujo.

Allí se presentó. Sin hora chapina ni nada. No serían más de las 10:10h. Yo aún en pijama, procuré ducharme rápido. Hablé con Julia la primera, no podía ser de otra manera (Mua!). Marco se deshizo de las chicas con delicadeza. Las íbamos a dejar solas y había que tener cierto tacto pues nosotros nos íbamos según Marco a “hacer gestiones”. Tampoco les preocupó demasiado pues significaba para ellas más horas de sueño.

Nos fuimos. Recordando batallitas de la noche anterior llegamos a la “U” (Así llaman a la universidad, no se complican xD). Fuimos a reclutar a unos cuantos coleguillas de Marco. La verdad que un buen rato entre hombres, teniendo en cuenta que he estado rodeado de féminas durante un mes… la verdad no me disgustaba jaja. Serían las 11:30 de la mañana cuando estábamos ya en la zona de bares tomando unas chelitas. Conversaciones masculinas con el mismo grado de “virilidad”. En todas las partes del mundo igual. jeje


Tienen montada una carpa permanente (como la poli) pegada a la U donde se juntan siempre al salir de clase. Se lo montan muy bien.


Ya mientras comíamos (Justo antes hablé con mamá, papá y tata, muchas gracias! Os quiero!)me llamaron las chicas: “¿Dónde estáis, que estamos solas!?”  Uff! Nos estaban esperando a comer! Les dijimos que a lo más tardar en 2 horas las iríamos a buscar (más hora chapina… 4 horas xD) y que fueran comiendo. Cierto es que le dije a Marco que nos apresuráramos pues tampoco había que quedar mal.

Seguimos tomando en el bar y conociendo gente. Divertido la verdad. Probando bebidas típicas e intentando enseñarles jugar al kinito. Todo un reto!. Ya se nos hacía tarde y llevábamos bebiendo varias horas (aquí empiezan bien temprano por la mañana). Mandé un sms a las chicas para que no se impacientaran más, ya llegábamos. Serían las 16:30h cuando decidimos movernos. No sin antes pasar a comprar unos licores en un kiosko para compensar la espera.

Ya de camino al albergue de las chicas, y tras agarrar los licores típicos de acá, tuvimos que pasar por casa de un familiar de Marco pues tenía que hacer un “mandado” (recado) a modo de favor. Subimos a casa de su tía. Yo como un chapín más. Entramos a su casa……… SORPRESAA!!! Gritaron allá dentro.  Ahí estaban TODOS! Raquel, Lorena, Toño, Margarita, Adriana y más gente que no conocía estaban con globos, una piñata, gorros, disfraz, tortilla de patata y espaguetis!! Estuvieron las chicas compinchadas con Marco en todo momento y con el resto… y yo me lo tragué hasta atrás!!





Estuvo genial! Una fiesta de cumpleaños en toda regla. Una sorpresa perfecta! Rotura de piñata, cena española y fiesta guatemalteca hasta las mil horas en otra discoteca.




Con pañal y una especie de sombrero de mujer raro para romper la piñata
Marco, Margarita, Raquel, yo, Toño, Adriana, Daniel, Marta y Lorena en la cámara


Un broche increíble para la semana grande de congresos que cerraba otro ciclo en este viaje.


Órale mi cuates!

P.D.: Un beso enorme para tod@s!!!

1 comentario:

  1. Hola Dani!

    Qué rabia no haber podido compartir esa maravillosa fiesta de cumpleaños con vosotros porque yo también estaba al tanto de la sorpresa!!

    Aunque te felicité en persona quiero hacerlo también desde aquí...FELIZ CUMPLEAÑOS!! Espero que a pesar de la distancia te sintieses tan querido como en casa.

    y quería darte / daros las GRACIAS por haber compartido conmigo este viaje y hacerlo tan especial para mí. MUCHÍSIMAS GRACIAS, porque habéis sido los mejores compañeros de viaje que se pueden tener!

    Y vale ya de tanta fiesta, no? quiero empezar a ver referencias al duro trabajo que estáis haciendo en Guate, jajaja.

    Un besito enorme, Os echo muuucho de menos!
    Rosa

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